ACOMPAÑAR JESÚS

 

Hoy, domingo de Ramos, conmemorando la entrada de Jesús en Jerusalén, nos disponemos a iniciar la Semana Santa. Queremos acompañar a Jesús en los mementos más intensos de su vida.

Jesús entra en Jerusalén como ningún rey lo ha hecho hasta ese momento: montado en un asno. Es un rey humilde y pacífico, aclamado por el pueblo sencillo, un rey fiel, coherente, dispuesto a llegar hasta el final, y que da la vida por su pueblo. Un rey que después de la Pasión triunfará sobre la muerte.

En Jerusalén se consuma su camino de fidelidad al Padre. Podía haber abandonado, podía haber evitado la cruz, pero no lo ha hecho. Él ha venido a hacer la voluntad del Padre y dar su vida. Su encarnación lo lleva hasta las últimas consecuencias.

Nosotros hoy también lo aclamamos, y reconocemos su grandeza y su fidelidad. Nos sentimos muy cerca de él.


Jesús M. Vergara, en “El Full Parroquial”, Diócesis de Girona, 14/04/2019