EL QUE HABLA

 

Arrodillado en su celda un monje vacía su corazón ante Dios. Al cabo de un rato el monje pregunta: ¿Por qué , Señor, cuando estoy aquí contigo, cuando estamos los dos juntos, sólo hablo yo?

Y Dios le respondió: Puede ser es que de nosotros dos, yo soy el único que escucha.


Del “Suplemento Parroquias Carmen / Mercadal”, Diócesis de Girona, 07/0/2019