Días atrás leía esta reflexión de Santa Teresa de Calcuta: "Hay muchas personas que quieren hacer cosas importantes, pero hay muy pocas que estén dispuestas a hacer las cosas pequeñas".

Qué gran verdad!

Muy a menudo se nos llena la boca con grandes proyectos, con buenas intenciones y buenos propósitos .... pero que pocas veces los ponemos en práctica!

Quizás tenemos una idea errónea de lo que implica estimar. Quizás no nos hemos dado cuenta de que el amor que nos pide Jesús es el amor de las pequeñas obras:

- Los dos peces y los cinco panes de los discípulos (Mt14,17)

- El acto de caridad de dar un vaso de agua (Mt 10:42)

- Todo lo que hacemos a los más pequeños (Lc 18,16)

Señor, ¿por qué busco la heroicidad de los grandes actos que nunca haré? Por qué pierdo el tiempo hablando de grandes milagros que me gustaría conseguir?

Dame la fuerza sufuciente para hacer las costosas pequeñas obras que si puedo realizar; ponme en el camino del Reino de los que hacen las obras de los hijos de Dios, para que el amor al prójimo es el auténtico amor a Dios.